Los invisibles

Hasta el 21 de abril de 2020 51,634 personas han sido testadas por coronavirus en México. De estas, solamente el 1% habla alguna lengua indígena. Por cada 100,000 personas que residen en municipios de mayoría indígena, a tan solo 4.9 se les ha realizado el test de diagnóstico, frente a casi 45 en municipios de mayoría no indígena.

El gobierno mexicano proporciona información del seguimiento al coronavirus diariamente. Los datos incluyen información sobre el número de tests realizados, casos confirmados y fallecimientos. Estos datos también permiten identificar si la persona (testada, contagiada o fallecida) habla alguna lengua indígena.

El reporte del 21 de abril de 2020 confirma que 51,634 tests han sido realizados, de los cuales 9,396 resultados fueron positivos. De los 51,634 tests realizados, solamente 504 (el 1%) fueron realizados a personas que hablan alguna lengua indígena. De los 9,396 resultados positivos, 105 corresponden a este colectivo (el 1%).

A pesar de que más de siete millones de mexicanos hablan alguna lengua indígena (7% de la población), la proporción de población originaria que ha sido testada por coronavirus es considerablemente menor. Utilizando datos del INPI y para entender la distinta prevalencia de personas testadas en un colectivo y otro, dividí a México en dos grupos. El grupo de municipios en los que menos del 50% de la población habla alguna lengua indígena, y aquellos donde el 50% o más la hablan. Como resultado, se confirma que la prevalencia tanto de personas testadas como de casos confirmados es desproporcionadamente menor en los municipios con mayoría indígena: por cada 100,000 personas que residen en municipios con mayoría indígena, solamente a 4.9 se les ha realizado el test del coronavirus, frente a casi 45 personas en municipios con mayoría no indígena.

Finalmente, realicé un mapa para entender las diferencias de “cobertura” de testeo entre ambos tipos de municipios. El resultado confirma los resultados anteriores: en el 78% de los municipios con mayoría indígena no se ha realizado ni un solo test a ningún residente.

Conclusiones

El sistema de salud mexicano tiene al menos dos retos fundamentales. El primero es contar con un sistema de información y seguimiento suficientemente ágil que permita diagnosticar en tiempo y forma para tomar decisiones bien informadas. El segundo tiene que ver con la cobertura del sistema: muchos de los municipios indígenas se encuentran en zonas remotas y son de díficil acceso, lo que dificulta que se les pueda dar una cobertura correcta. Pero existe un reto añadido y constante que no tiene que ver con el sistema de salud, sino con nuestra sociedad. Los pueblos originarios deben dejar de ser invisibles y debemos acabar con su exclusión sistemática de los servicios básicos, como es la salud.